El esmalte holográfico, también conocido como esmalte 3D, contiene una gran cantidad de partículas de “diamantes” lo que da a la uña aspecto de arcoíris. Esta tonalidad va variando en función de la intensidad de la uña.
Hay esmaltes de distintos acabados y colores. A pesar de ese acabado arcoíris no tiene por qué ser de efecto purpurina o con glitter. Los hay en tonos más neutros pero con ese brillo intenso que caracteriza este tipo de manicura.
Cómo se aplica este esmalte
Normalmente, los esmaltes holográficos incluyen ya esas partículas que hace que tomen ese color. Por lo que, no es un proceso poco complicado. Simplemente deberás aplicar varias capas para lograr una manicura más gruesa.
Además, puedes variar entre distintos estilos. Bien decantarte por uñas del mismo tono o jugar con otras texturas como manicuras de purpurina, con dibujos geométricos, degradados o con esmaltes mate.